miércoles, febrero 04, 2009

CARTA A POETAS DEL MUNDO Y OTROS INTELECTUALES

04 de febrero de 2009



Estimados todos:

Hace tiempo que quería escribirles sobre lo que pienso acerca de la reciente campaña de Poetas del Mundo del que soy miembro y embajador y otras similares, acerca de los combates en Gaza. No quise responder con apresuramiento y emotividad y hoy lo hago con respeto y fraternidad. Lo que finalmente me decidió fue el comentario de mi amigo Luis Manzo, que escribió que él solamente publicó textos antiisraelíes porque nadie le envió posiciones diferentes. Lo cierto es que me sentí apabullado ante muchos de ellos, y temí y descubrí mi pánico cuando sospeché que pueden servir de excusa para generar una nueva ola de fobia racista antijudía en mi América Latina, y aún lo siento.

¿Cómo habría podido remar en contra de la corriente si desataron una catarata parecida a la Garganta del Diablo del Iguazú? ¿Qué habría logrado con una gota de agua en un huracán furioso?

Les aclaro que en esta oportunidad no voy a focalizar mi posición en favor de Israel o del gobierno de Hamas de Gaza, sino que les pido me permitan hablar del poeta y su responsabilidad social. De su responsabilidad en el uso de la más poderosa de las armas: LA PALABRA, y les pido que pensemos en el odio y el amor que sale de nuestras escrituras y en el uso que de ellas hacen los interesados.

Incluso en nuestras propias familias o con nuestros amigos, ¿Cuántas veces pronunciamos palabras que hieren y una vez dichas ya no las podemos borrar? Hasta los actos de deslealtad y traición se llegan a perdonar (a veces con una sonrisa o un beso…), mas las palabras y ¿Qué decir de las escritas?, esas quedan grabadas eternamente.

Tomar partido es importante y necesario, ya que no hay nada peor que la indiferencia, lo digo por haberla sufrido en carne propia durante la dictadura, pero una cosa es tomar partido y otra es deformar la historia.

Todos sabemos que el conflicto árabe – israelí, es complejo y produjo muchas víctimas en ambos lados y ocho guerras, la mayoría comenzadas por los países árabes. Si analizamos las circunstancias sociales, políticas, de intereses internacionales, económicas, históricas y hasta emocionales, encontraremos variaciones y contradicciones que afectan a los ciudadanos simples, que sin excepción buscan la paz y los que entienden, no dudan que la única alternativa es la convivencia pacífica basada en el respeto mutuo.

En muchos textos de la campaña de Poetas del Mundo, cuya cuenta ya perdí, se acusa a los israelíes, de criminales, genocidas, de producir un holocausto que muchos equiparan con el producido por la Alemania Nazi durante la 2da Guerra Mundial y hasta muestran fotos retocadas que ilustran tal tipo de analogía.

Analicemos el significado de las palabras "Genocidio" y "Holocausto", que es casi religiosos para los que lo han sufrido. El término "Genocidio" está definido por la Convención para la Prevención y el Castigo de los Crímenes de Genocidio, artículo 2, adoptada por la Asamblea General de las Naciones Unidas en 1948 y queda claro que sin "intención de destruir, total o parcialmente, a un grupo nacional, étnico, racial, o religioso" no se puede hablar de genocidio y por tal, ningún país responsable hizo oficialmente ese tipo de acusaciones, que por otro lado, con tanta liviandad lo usan muchos de mis colegas. No tengo que explicar aquí lo que fue el Holocausto Nazi y es evidente que quien equipara a Israel con Alemania Nazi, deforma la historia; deforma el conflicto Árabe – Israelí; deforma el Holocausto insultando a sus víctimas; perdona a los nazis enjuiciados en Nuremberg; y prepara el terreno para una nueva ola judeo-fóbica mundial.

Recuerdo que hace un par de años me dijo un amigo palestino el Dr. Ahmed Ajurii, que es embajador en Irlanda, "No te imaginas Ernesto lo que significa para un palestino que le reconozcan sus derechos de tener su propio país, su pasaporte, su identidad…" Ahora te digo a ti hermano poeta: No te imaginas el insulto que me haces diciendo falsamente, que no hay diferencia entre mi familia a la que llevaron al crematorio por ser miembro de una comunidad y tal o cual víctima en una guerra entre dos pueblos. Hace un mes me acusaste de criminal Nazi porque el ejército de Israel bombardeó un colegio en Gaza y murieron 40 personas que se refugiaron en él, ayer, 3 de Febrero, la Comisión Investigadora de las Naciones Unidas concluyó que la denuncia fue simulada y que no hubo tal bombardeo. Pero tus palabras escritas ya no las puedes borrar y produjeron un efecto terrible.

El poeta puede escribir lo que quiera y no está comprometido a respetar cosas tales como el Juramento Hipocrático de los médicos, por eso no puedo obligar, sino que pido y ruego que trabajemos para aplacar el odio y traer concordia, amor y ternura para los pueblos. Les aseguro que eso requiere mucha mayor templanza de espíritu que enjuiciar e incendiar hogueras.

Hoy día, con la existencia de armas que pueden destruir totalmente la vida sobre el planeta, este recado tiene una significación única y llama a los poetas a reflexionar sobre su responsabilidad social cuidando sus palabras.

Después de todo somos diferentes de las hordas ebrias fanáticas.





Profesor Dr. Ernesto Kahan. Facultad de Medicina, Universidades Tel Aviv y Bar Ilan, Israel

Vicepresidente-Congreso Mundial de Poetas - Academia Mundial de Arte y Cultura

Presidente-Asociación Israelí de Médicos por la Paz y ex-Vicepresidente de IPPNW (NOBEL 1985)

Vicepresidente-IFLAC (Forum Internacional por la Literatura y Cultura de Paz)

Presidente Adjunto de la UHE- Unión Hispanoamericana De Escritores

Presidente de AIELC- Asoc. de Escritores en Lengua Castellana de la Federación de Escritores de Israel

Embajador Universal de la Paz - Israel. Circulo Universal de Embajadores de la Paz - Ginebra - Suiza.

Embajador en Israel del Movimiento Poetas del Mundo

Miembro de Honor de la Sociedad de Arte de Bolivia y la Casa del Poeta Peruano